Blanco,explicó que el problema de que muchos crímenes se queden sin resolver reside en que, pese a tener «unas fuerzas de seguridad que trabajan a las mil maravillas, estas tienen las manos muy atadas. Lo que habría que preguntarse es quién les ata tanto».
Pese a estas limitaciones, el criminólogo destacó que, «afortunadamente, en este país se mata muy poco y mal». En este sentido, explicó que en España «no hay una delincuencia profesionalizada que no deje ningún tipo de vestigio ni prueba biológica, sino que se encuentran sucesos como el de Marta del Castillo, que fue cometido por unos jóvenes que ni lo tenían premeditado y que tenían que haber dejado numerosas pruebas, y seguimos el cuerpo de Marta».
De ahí que Blanco afirmara que no existe el crimen perfecto. «Es absolutamente imposible por una cuestión muy sencilla, y es que con el azar no se puede contar. Aunque se planifiquen las cosas al 100% luego uno no sabe lo que pueden deparar los hechos. Es imposible tener controlados todos los cabos, y más con los medios técnicos con los que contamos».
Pero para el periodista hay un problema mayor, y es que «prácticamente ha desaparecido la información de sucesos en este país, hasta el punto de que no se informa de la existencia del 95% de los casos».»En España se producen tres asesinatos diarios de media, unos mil asesinatos al año, según cifras del CGPJ, y no vemos información ninguna sobre ellos en los medios de comunicación», resaltó Juan Ignacio Blanco.
Antes la relación entre medios y Policía era de colaboración, y esto ya no es así. «Trabajar sobre bulos, opiniones, datos de vecinos y sin las principales fuentes es muy complejo», explicó.El interés de «los últimos gobiernos en demostrar que este es un país donde no pasa absolutamente nunca nada y que los propios medios ya no quieren destinar recursos de ningún tipo a la investigación» son otras de las razones que han hecho de los sucesos «un tema tabú».
Juan Ignacio Blanco señaló que se trata de «una comunidad privilegiada, pues la mayoría de los casos que han tenido cierta trascendencia y relevancia se han solventado todos de forma correcta y con la detención de sus autores. Otra cosa es que queden innumerables dudas respecto a los hechos, como las que tengo en el caso del Brujo o del asesino en serie de Telde, entre otros».
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